<iframe src=https://www.facebook.com/plugins/post.php?href=https://www.facebook.com/photo/?fbid=10219184436059401&set=p.10219184436059401&width=500&show_text=true&height=568&appId width=500 height=568 style=border:none;overflow:hidden scrolling=no frameborder=0 allowTransparency= allow=autoplay; clipboard-write; encrypted-media; picture-in-picture; web-share allowFullScreen=true></iframe>
Ya saben que ninguna de sus disciplinas, por muchos adeptos que han ganado en los últimos años, estarán presentes para los Juegos de París 2024, aunque, por lo menos sí que hay esperanzas de futuro al ser un deporte con mucho auge en la sociedd.
El kick boxing y las artes marciales mixtas son unos de los deportes de mayor crecimiento en la sociedad en los últimos años. Su repercusión, antes muy limitada a los países orientales, empieza a ser mundial y por eso llevan un tiempo llamando a las puertas de unos Juegos Olímpicos que de momento se niegan a contar con esas disciplinas.
Sin plazas en 2021 y 2024
Para Tokio 2021 han sido incluidos como nuevos deportes el béisbol, el kárate, el surf, el skateboard y la escalada, todos ellos por el alto auge social que han tenido en la última década en sus diferentes competiciones, sobre todo los tres últimos. Por eso, es de esperar que pronto, la gran repercusión del kick boxing, sobre todo en Europa, le abra definitivamente las puertas de la Villa Olímpica a sus luchadores.
Sin embargo, ya se sabe que para París 2024 tampoco se contará con ninguna de las especialidades de la MMA en su cartel, pues ya se ha hecho oficial que se le dará continuidad al surf, la escalada y el skate, además de incluir el breakdance, una decisión controvertida y que ha levantado mucho ruido a su alrededor.
Un tirón mediático importante
Es importante saber que las artes marciales mixtas están principalmente representadas por una UFC que cuenta en su canal de YouTube con más de 8 millones de seguidores activos, que pueden disfrutar de sus combates online y las apuestas que los rodean. Por supuesto, son mundialmente famosos algunos de sus luchadores, como Khabib Nurmagomedov, Conor McGregor o Ronda Rousey.
Además, por ejemplo en paises como España, el kick boxing ya tiene a más de 10 000 federados y cada vez va recortando más a otras artes marciales ya consagradas en ese país, como son el judo o el kárate, ambas ya con su propia competición en los Juegos. Y por supuesto, ayuda mucho el hecho de tener a una tetracampeona mundial como es Cristina Morales, con una historia que todos conocen y engrandece el pundonor de la sevillana.
Por suerte, el kick boxing ya ha sido incluido en los Juegos Europeos del 2023, que se celebrarán en la ciudad polaca de Cracovia. Este movimiento se lee desde sus asociaciones y federaciones como un avance para alcanzar por fin ese sueño olímpico y poder formar parte, algún día cercano, de unos Juegos que se están abriendo camino con nuevas disciplinas con tirón social y es posible que para el 2028 pueda tener alguna de estas artes marciales en su programa.
Pero, lo que está claro es que una vez se implementen dentro del programa olímpico, la repercusión mediática que esto supone multiplicará las licencias federativas en el mundo entero y el interés por un deporte con unas altas cotas televisivas ya hoy en día, con un seguimiento desde los cuatro costados del planeta.